¿Qué medidas de precaución puedo tomar frente a situaciones de violencia o maltrato?
La seguridad personal y la vida no tienen precio. Si usted teme por su seguridad o la de sus seres queridos, lea cuidaosamente las siguientes afirmaciones y actúe, especialmente si ya ha solicitado una medida de protección:
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El acto violento es responsabilidad de la persona agresora.
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La agresión es progresiva y se hace más grave conforme pasa el tiempo.
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Antes de aceptar una reconciliación o acercamiento, recuerde que los actos de violencia pueden repetirse y pueden llegar a acabar con su vida y la de sus hijas e hijos.
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Converse sobre su problema con una persona de confianza (familiar, vecina, amiga, compañera de trabajo o profesional de alguna institución).
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Trate de no permanecer a solas con la persona agresora y de no quedarse en lugares cerrados de su casa u otro lugar cuando hay discusiones fuertes, golpes, amenazas u otras formas de maltrato.
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Con la ayuda de una vecina, amiga o familiar trabaje en un sistema de alerta que les permita enterarse si usted está en una situación de peligro; por ejemplo, una llamada por teléfono en clave, una luz encendida, emisión de algún ruido, o cualquier otra señal. Estas señales las puede practicar con las personas menores de edad que vivan con usted. Enséñeles a llamar al 911, si no tiene teléfono enséñeles a ubicar a una persona cercana que sea de su confianza.
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Si la persona agresora llega a su casa, le llama o le busca en cualquier lugar, o le amenaza, llame de inmediato al 911.
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No es recomendable andar a solas o con sus hijas e hijos por la calle u otros lugares donde pueda encontrarse con la persona agresora.
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Si ve a quien le agrede, de inmediato trate de entrar a algún lugar seguro donde haya personas que puedan protegerla (tienda, policía, otra casa, etc.)
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No acepte que quien le agrede entre a su casa o donde usted se encuentra, hágase acompañar siempre de alguna persona adulta y avise al 911.
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Avise en la escuela, guardería o colegio, donde están sus hijas e hijos para que se les proteja.
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Utilice todas las medidas de seguridad que tenga a mano para protegerse.
Tenga presente que su vida vale mucho y que puede recibir ayuda y protección para su seguridad y la de sus hijos e hijas. Usted ya dio un gran paso al gestionar medidas de protección.